"Tagito" sigue haciendo de las suyas.
El día 29 de Octubre la Biblioteca José Pedro Varela comunicó a través de la redes sociales, el comienzo de un trabajo en arte mural homenaje al personaje pichonero "Pepino el 88".
La iniciativa fue impulsada por el Maestro Yens "Tagito" Schou, referente cultural, profesional en turismo e impulsor del Museo de Arte Mural desde 1998 en Rosario.
Así lo manifestó la institución popular en Facebook:
"Seguimos conociendo nuestra historia a impulso del incansable Tagito,
"Pepino el 88" tendrá su reconocimiento en un mural en Biblioteca José
Pedro Varela a cargo del artista plástico Gabriel Vuljevas colaborando
con esta obra la diseñadora Laura Alvarez y la artesana Ana Würth."
José Juan «Pepe» Podestá fue un actor uruguayo integrante de la familia de artistas rioplatenses Podestá, nacido en Rosario el 6 de Octubre de 1858.
El personaje surgió por una casualidad. En 1873 Pepe Podestá ya se lucía como acróbata y trapecista en un modesto circo que había armado junto con sus hermanos y algunos amigos. Los malabares los había aprendido después de ver viejos circos europeos que llegaban a su ciudad, Montevideo. Los primeros ensayos habían sido en la playa donde la gente que los veía actuar, les dejaba algún “vintén” (vieja moneda de 20 centésimos) como pago. Pero un día, en el circo, faltó el payaso. Entonces José, usando unas viejas sábanas, se armó una vestimenta a la que adhirió cuatro redondeles negros que parecían dos números ocho. El apodo de Pepe se convirtió en Pepino y la gente le agregó el 88.
El personaje surgió por una casualidad. En 1873 Pepe Podestá ya se lucía como acróbata y trapecista en un modesto circo que había armado junto con sus hermanos y algunos amigos. Los malabares los había aprendido después de ver viejos circos europeos que llegaban a su ciudad, Montevideo. Los primeros ensayos habían sido en la playa donde la gente que los veía actuar, les dejaba algún “vintén” (vieja moneda de 20 centésimos) como pago. Pero un día, en el circo, faltó el payaso. Entonces José, usando unas viejas sábanas, se armó una vestimenta a la que adhirió cuatro redondeles negros que parecían dos números ocho. El apodo de Pepe se convirtió en Pepino y la gente le agregó el 88.
Obra finalizada y publicada el 31 de Octubre por Biblioteca:
Fotografías pertenecientes a la Biblioteca Popular José Pedro Varela.-
Fuente: Clarín.
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